Celulares para niños: ¿cómo influye el uso excesivo a los niños?
Piensas y te dices a ti misma: “Solo un ratito para que deje de llorar…” Y cuando menos lo esperas, tu pequeño ya está desbloqueando más rápido que tú el celular o la tablet. Cuando menos lo esperas, el dispositivo digital termina siendo una “niñera digital”.
Descubramos juntas en este artículo cómo influye el uso excesivo del celular a los niños, a qué edad se recomienda que un niño tenga un celular y demás datos útiles para encontrar un equilibrio entre el uso de la tecnología y el desarrollo de tu peque.
¿Qué edad debe tener un niño para tener un celular?
Según la UNICEF, se debe evitar que los niños de 6 años estén navegando solos por internet, ya sea a través de un celular o en una tablet, y de ser así, el uso de las redes sociales debe ser supervisado por algún adulto.
¿El uso del celular causa algunas enfermedades?
Es posible que te parezca TMI (Too Much Information), pero el uso excesivo del celular podría acarrear enfermedades, entre las que está la nomofobia, la cual se refiere a ese miedo irracional a sentirse desconectado por no tener un celular o una tablet disponible.
En los niños, suele manifestarse con síntomas como nerviosismo, inseguridad, ansiedad o incluso agresividad, por lo que es recomendable establecer límites sanos sobre el uso de los dispositivos móviles.
¿Afectan las redes sociales al desarrollo infantil?
Si bien el uso de los celulares para niños, utilizados de la manera correcta, puede ser benéfico para los peques, pueden existir riesgos que es mejor no ignorar, como un desarrollo negativo en el cerebro, la exposición a contenido inapropiado para un niño, acoso, y la interacción en redes sociales, que podría afectar a niños que han sido diagnosticados con TDAH (añadir significado de las siglas), depresión y ansiedad.
¿Cómo fomentar un buen uso de la tecnología en niños?
Te compartimos algunos tips para lograr que tu peque haga buen uso de los dispositivos digitales bajo tu cuidado y atención:
Determina momentos libres de cualquier pantalla, como, por ejemplo, la hora de la comida y la hora de dormir.
Si tu hijo es un poco más grande, habla con él sobre las actividades que hace en línea, como el uso de las redes sociales.
Da un buen ejemplo sobre cómo utilizar prudentemente las redes sociales, para que tu peque imite tus buenos hábitos.
Revisa la configuración de privacidad de los dispositivos digitales, poniéndola en el nivel más seguro y hablando con él sobre con quién puede platicar en línea.
Piensa varias veces antes de darle el teléfono a tu peque. Si es muy pequeño, reflexiona si decides limitarle su uso.
Preguntas frecuentes
Entre una de las consecuencias que puede tener el uso excesivo de pantallas, está la alteración del ritmo del sueño y el ritmo circadiano, disminuyendo la secreción de melatonina, que es la hormona encargada de regular el ciclo del sueño y la vigilia.
Aunque el uso de los dispositivos digitales puede ser útil, no debería ser la primera opción para calmar o entretener a un bebé. Es importante que, como mamá, no expongas a tu pequeño por largos ratos a su uso, considerando que durante sus primeros años de vida, se recomienda que se entretengan con juegos que estimulen su desarrollo mental y/o cognitivo.
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Fuentes
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