El nacimiento y las cuatro primeras semanas del bebé
¡Bienvenidos a la maternidad y a la paternidad! Junto con la alegría y la emoción que trae consigo un bebé de 0 mes, es posible que también te sientas agotada y abrumada, y estamos aquí para ayudarte.
Repasaremos los hitos del desarrollo de tu bebé desde el nacimiento hasta el primer mes, hablaremos de la frecuencia y el tiempo en el que tu bebé puede alimentarse y dormir este mes; y abordaremos información importante sobre la salud de tu recién nacido.
El médico de tu bebé es el experto en desarrollo saludable, pero nosotros abordaremos algunos de los aspectos más destacados y te daremos algunos consejos útiles. Entremos de lleno en este primer mes, que abarca las semanas una, dos, tres y cuatro.
¡Sigue leyendo para saber en qué momento llevar a tu bebé de cuatro semanas a su primera cita médica!
Checklist del recién nacido
Programa la revisión del primer mes de tu bebé, y puedes preguntar en la consulta a tu pediatra sobre cualquier otra revisión, exploración física, prueba de cribado o vacunación que tu bebé necesite en este mes.
Los expertos recomiendan al menos una visita al médico cuando el bebé tenga entre dos y cuatro semanas para asegurarse de que se encuentra bien.
Pídele al pediatra de tu bebé que te de algunos detalles sobre el calendario de vacunación de tu pequeño. Anota qué vacunas son necesarias, y cuándo y dónde tendrán lugar.
Escribe una lista con cualquier otra pregunta o duda que tengas y hazlas en tu próxima visita al médico.
Pega los números importantes en el refrigerador o guárdalos en tu teléfono. Entre ellos deben figurar los del pediatra de tu bebé, el teléfono de información toxicológica y el número de servicios médicos de urgencia (ambulancia).
Consigue un botiquín de primeros auxilios para casa, que puede ser útil para cualquier pequeño rasguño. Si tienes un carro, considera la posibilidad de tener otro botiquín para el coche.
Rutina del recién nacido
Aunque no hay una rutina del recién nacido definida, te compartimos un ejemplo de rutina diaria de alimentación, sueño, baño y juego:
Sueño
Alrededor de 16 y 17 horas al día, tal vez una o dos horas cada vez
Es posible que tengas que despertar al bebé para alimentarlo
Ponlo a dormir boca arriba para reducir el riesgo de SMSL (Síndrome de muerte súbita del lactante)
Alimentación
Al menos 8 tomas en un periodo de 24 horas, pero puede variar
Si el bebé se chupa el puño, puede significar que tiene hambre
Cambio de pañales
Las primeras deposiciones serán espesas y de color negro o verde oscuro
Es normal encontrar al menos seis pañales mojados al día
Descubre algunas de nuestras opciones de pañales para recién nacidos
Juegos
Mantén el contacto constante con tu bebé
Acarícialo y háblale
Enséñale un juguete con colores
Curiosidad
Tu hijo puede ver mejor dentro de un rango de 30 centímetros, ¡haciendo que su cara sea el foco principal!
Algunos cuidados importantes para un recién nacido
Salir de casa
No dudes en sacar a tu recién nacido al exterior cuando haga buen tiempo, asegurándote también de que va vestido adecuadamente.
La capacidad de tu bebé para regular su temperatura corporal aún no está completamente desarrollada, por lo que la regla general es añadirle una capa de ropa más de la que llevas tú. Si hace sol, mantenlo a la sombra, ya que su piel puede quemarse con facilidad. Si hace mucho frío o llueve, quizá sea mejor que sólo salga un rato.
Asegúrate de que tu bebé tiene un gorro calentito, además de suficientes capas y mantas adicionales. Para comprobar que tu bebé está cómodo, asegúrate de que tiene el pecho caliente y las manos y los pies un poco más frescos que el resto del cuerpo.
Cambio de pañales
Uno de los elementos de la rutina diaria de tu bebé de 0 mes será el cambio de pañales. Antes de empezar, asegúrate de tener a mano todos los artículos necesarios para el cambio de pañales.
Mantén una mano encima de tu bebé en todo momento y no lo dejes desatendido en el cambiador o en cualquier superficie más alta que el suelo, ya que puede retorcerse y caerse con facilidad. Para prevenir la dermatitis del pañal, quítale los pañales mojados o sucios lo antes posible. Después de retirar el pañal sucio, limpia la zona con un paño suave y ponle un pañal nuevo.
Bañar al bebé en las primeras semanas
Para mantener seco el muñón del cordón umbilical, durante las primeras semanas baña al bebé con una esponja. Sigue haciéndolo hasta que el muñón se caiga por completo. Una vez que la zona del cordón se haya curado, puedes empezar a bañar al bebé en la bañera o en el lavabo, pero recuerda que puede que sólo necesite bañarse tres veces por semana durante el primer año, sobre todo si limpias bien la zona del pañal en cada cambio.
Lee nuestro artículo: El primer baño del bebé
Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a sobrellevar las primeras veces que bañes a tu bebé de pocas semanas:
Asegúrate de que el agua esté templada pero no caliente al tacto en la muñeca o el codo.
Ten a mano todo el material necesario para no dejar nunca solo a tu bebé.
Báñalo justo después de desvestirlo para que no se resfríe.
Sujétale la cabeza y el cuello cuando le coloques en la bañera o el lavabo y mientras le bañas. Mantén la cabeza y la mayor parte del cuerpo muy por encima del nivel del agua para mayor seguridad.
Para lavar la cara del bebé, utiliza un paño suave y jabón suave para bebés, añadiendo champú una o dos veces por semana para el pelo. - Si tienes un niño, simplemente limpia sus genitales con agua y jabón como harías con el resto de la zona del pañal. El profesional sanitario de tu bebé te indicará cuándo el prepucio está correctamente separado y, a partir de ese momento, podrá retraerse y limpiarse con seguridad.
¿El contacto piel con piel ayuda a mi bebé?
El contacto piel con piel es beneficioso para el bebé de cuatro semanas en muchos sentidos. Coloca a tu bebé boca abajo en el suelo durante un rato todos los días. Ayúdale a practicar el seguimiento ocular moviendo lentamente un objeto delante de sus ojos.
¿Cómo sé si mi bebé tiene hambre?
Una señal de que tu bebé está comiendo lo suficiente: estar lleno durante unas horas después de comer. Es probable que tu recién nacido necesite comer al menos 8 veces al día.
Cuando está lleno, puede parecer cansado o dormirse.
Si estás dando el pecho y te preocupa tu producción de leche, o si tu bebé se agarra o se alimenta correctamente, pide ayuda a tu médico o a un especialista en lactancia. Si tomas leche de fórmula o biberón, consulta nuestro artículo sobre leches infantiles y de fórmula.
¿Necesita tu bebé suplementos alimenticios? Tanto si tu bebé toma el pecho como si se alimenta con leche artificial o una combinación de ambas, es posible que quieras hablar con el pediatra sobre si debes complementar la alimentación de tu bebé. Por ejemplo, los suplementos de vitamina D y hierro pueden ser recomendables hasta que el bebé tenga 12 meses.
Seguimiento de pañales mojados y sucios
Es normal que te preguntes si tu bebé de 0 mes come lo suficiente. Una forma de comprobarlo es llevar un registro de los cambios de pañal: cuántos le cambias y qué aspecto tienen. Durante los primeros días, no te sorprendas si las heces de tu bebé son espesas y de color verde oscuro o negro: son sus primeras deposiciones normales, compuestas de meconio. Una vez eliminado el meconio, sus heces cambiarán a un color amarillo verdoso y se volverán más blandas y líquidas.
Cada bebé es diferente, pero probablemente puedes esperar al menos seis pañales mojados y al menos tres o cuatro pañales con caca al día. Otros signos de que tu bebé come lo suficiente son si puedes oírle tragar y si parece satisfecho durante unas horas después de comer.
A lo largo de un periodo de tiempo más prolongado, el médico de tu bebé te ayudará a comprobar que se alimenta lo suficiente controlando su crecimiento. Aunque estos primeros cambios de pañal pueden ser un reto, ¡pronto te convertirás en una profesional!
Otra información importante
¿Es seguro recibir visitas?
Es natural que en los primeros días después del parto quieras que te visiten familiares y amigos cercanos, pero procura que sean pocas personas y que las visitas sean discretas para que tú y tu bebé puedan descansar y recuperarse. Durante el resto del primer mes, reduce el número de visitas y asegúrate de que no estén enfermas, ya que así evitarás que tu bebé contraiga una infección. Pide a todas las visitas que se laven las manos antes de tocar a tu hijo.
Intenta limitar las visitas durante las primeras semanas de vida. Si la piel de tu bebé está amarillenta, habla con su pediatra. Asegúrate de que todas las visitas se laven las manos antes de cargar a tu bebé.
Ictericia:
Si la piel de tu bebé tiene un color amarillento, puede tener ictericia, una afección en la que el hígado aún no ha empezado a eliminar de la sangre una sustancia química llamada bilirrubina. El pediatra diagnosticará y tratará esta enfermedad.
Fiebre:
La mayoría de los bebés tienen fiebre en algún momento, pero a veces es difícil saber cuándo un recién nacido tiene fiebre. En las primeras 12 semanas, los bebés con fiebre necesitan atención médica urgente, así que si tu bebé tiene calor o está irritable, tómale la temperatura con un termómetro rectal. Si tiene 38 °C o más, busca ayuda médica inmediatamente.
Después de observar los importantes cuidados de tu bebé, también tienes que cuidar de ti misma. Intenta dormir lo mejor que puedas cuando duerma tu bebé en los días posteriores al parto. Durante los 10 días posteriores al parto, es posible que te sientas dolorida mientras el útero recupera su tamaño normal. Beber más agua y comer alimentos ricos en fibra puede ayudar a aliviar el estreñimiento después del parto.
¿Son normales los movimientos espasmódicos de mi bebé?
Tu recién nacido sólo puede ver a una distancia de entre 20 y 30 cm. El tacto es uno de los sentidos más importantes para el recién nacido. Puede llorar para comunicar hambre, malestar o para liberar tensiones.